EL SEXO TÁNTRICO se basa en encuentros largos y relajados, sin prisas, se busca el éxtasis y alcanzar un placer más prolongado. Lo importante es el recorrido, no es destino. Para los tantristas, la eyaculación es una pérdida de energía y sostienen que para alcanzar el máximo placer y disfrutar de orgasmos múltiples, hay que retrasar el mayor tiempo posible la eyaculación y, de ser posible, evitarla. Algo similar ocurre con las mujeres, uno de los puntos clave para conseguir el máximo placer es que el hombre pueda, sepa y mantenga durante el mayor tiempo posible la erección pues con ello la mujer obtiene intensos y numerosos orgasmos.
En la disciplina tántrica hay una serie de prácticas que contribuyen a realzar el placer y la conexión entre dos personas. Éstas son:
. Mantén los ojos abiertos, siempre mira a tu compañero, los ojos no pueden ocultar los sentimientos.
. Recorre su cuerpo: con pausa , sin apuro y de forma ordenada, recorre el cuerpo de tu compañero y detente en aquellas partes que le brindan mayor placer.
. Relájate y respira: olvídate de la presión del acto, concéntrate en disfrutar y divertirte, tienes todo el tiempo del mundo.
. El toque consciente: no aceleres los tiempos, entrégate en cada beso y en cada caricia. Sé verdaderamente consciente de tus movimientos y del lugar que ocupas. Habita el espacio.
. La técnica Kegel: consiste en contraer los músculos de la pelvis, hazlo en los momentos adecuados para prolongar el placer. (MARTHA MEJIA, SEXOLOGA)
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